Mi nombre es Anna Olivares, farmacéutica dedicada a los ensayos clínicos. Como algunos de vosotros, soy corredora amateur de trail de larga distancia desde hace ya unos años. El pasado 2 de octubre tuve la suerte de participar en la Salomon Ultrapirineu 100K. Carrera de montaña con 100km y 6200 metros de desnivel positivo que recorre el Parc del Cadí-Moixeró. No la tenía en mi calendario ni me planteé hacer mis primeros 100K este año, pero gracias a Runnerinn tuve la suerte de estar en la mítica Plaça Porxada compartiendo línea de salida con corredores de élite internacionales.

Crónica

1 minuto para la salida, se apagan las luces y encendemos los frontales, abrazos, el último mohicano sonando, nervios y respeto por el reto que tengo por delante. Cuenta a atrás y da comienzo a unas de las carreras más emblemáticas del trailrunning. 

Esta edición presentaba un recorrido similar a la edición de 2019, en la cual me retiré en el km 72. 

Este año, los primeros 6 km fueron por pista forestal, manteniendo ritmo constante llegué  Rebost (AV1) unos minutos antes de la previsión que había planificado, no necesité nada, así pasé de largo y encaré una de las subidas más emblemáticas y duras de la carrera hacia el Niu de l’Àliga, punto más alto de la carrera. Un ambiente espectacular hace que recorte 15 min mi previsión, un plus de energía y motivación para llegar a Serrat de les Esposes (Km 31), donde me iba a encontrar con mi pareja que me hacía la asistencia. Me encuentro con ganas y con fuerzas, hasta Gósol (km 61) no iba a tener la siguiente asistencia, así que me puse la música y mi estrategia fue hacer metas cortas de avituallamiento en avituallamiento.

De Cortals (Km 36) a Prat d’Aguiló (km 48) fue un tramo duro, al llegar a Prat d’Aguiló sabía que solo me quedaba subir hasta el Pas de Gosolans y luego bajada espectacular hasta Gósol. Mi motivación? ver a mi asistencia y comer bien.

Fui recortando minutos a mi previsión, así que llegué al Km 61 en menos de 10h. El ambiente en Gósol era especular, llegué cansada pero las ganas por seguir corriendo estaban aún al 100%. Me notaba bien, con fuerzas, sabía que la carrera “empezaba” a partir de ese punto, así que comí segun lo pautado con mi nutricionista, cambio de calcetines, cambio de bolsas “Zip” de comida, soft flasks llenos y sigo camino a Estassen. El próximo punto donde tendría asistencia sería ya en Vents del Cadí (km 83). 

Bajada un tanto técnica de Estassen a Gresolet (Km 74), mi punto débil. Decidí correr con bastones y fue la decisión más acertada ya que me ayudaron mucho en ese tramo, incluso en bajada.

Pasado Gresolet encaro, cansada, hacia el Coll de la Bauma, sabía que después venía un terreno de pista y sendero sin mucho desnivel que me llevaría a Vents del Cadí (Km 84). Llego a Vents con fuerza, sabiendo que solo me quedaban 16 km para llegar a Bagà, empiezo a creer que este año sí que iba a cruzar esa meta. ¡Ultimo avituallamiento! salgo rápido, me despido de mi pareja al que ya no vería hasta meta, enciendo el frontal y empiezo la última subida, empredats hacia Sant Jordi. Por suerte me espera un amigo que me acompaña y hace que haga el último tramo más rápido de lo previsto.

En los últimos 2 km, a diferencia de la edición de 2019, se passa por la via Nicolau, se empiezan a ver las luces de Bagà, se oye al speaker y una sensación indescriptible me invade, aun había gente en la plaza, aplausos y … FINISHER!!! 17:23h, 19 en la general femenina. No podia estar más feliz.

Material

Salomon Ultra Glide 

Para la SUP21, elegí las nuevas zapatillas de Salomon, las Ultra Glide.

Una zapatilla ligera, cómoda, amortiguada, estable, con suela contagrip. Zapatilla perfecta para correr larga distancia y en gran variedad de superficies como te encuentras en la salomon ultrapirineu: terreno húmedo, seco o con piedra no excesivamente técnico. La parte superior de es de secado rápido y transpirable, con el sistema SensiFitTM y Quicklace el pie de adapta a la zapatilla proporcionando control y precisiónen la pisada. No tuve sensación de pesadez durante la carrera, ni rozaduras ni heridas hecho que agradecí al finalizar los 100 km.

Sin duda un gran descubrimiento para esas tiradas largas o carreras de larga distancia. 

Suunto 9 Peak 

Suunto y Runnerinn me dieron la oportunidad de probar el nuevo Suunto 9 Peak para ayudarme a afrontar mi reto.

Más que daros especificaciones, que las podéis encontrar en la web, me gustaría daros mi opinión o punto de vista. Es un reloj que me ha sorprendido gratamente: primero por su ligereza y tamaño, mi muñeca es pequeña, no queda exageradamente grande y pesa muy poco.

Pero lo que más me sorprendió es la duración de la batería, para la ultrapirineu puse el modo GPS 25h y desactivé las notificaciones del móvil por precaución, pero tiene hasta 120h en modo entrenamiento con el GPS activado y no tuve ninguna sorpresa durante la carrera. Estuve 17h y aún quedaba más del 40% de batería.

En cuanto a los datos, el 9 Peak es muy visual e intuitivo, y el hecho de que sea táctil hece que sea más ágil al cambiar de pantalla. Yo por ejemplo suelo ponerme en una misma pantalla datos de distancia, tiempo y desnivel positivo.

Me sorprendió la precisión de kms y desnivel comparándolos con otros corredores, en esta edición de la ultrapirineu, segun la organización, eran 100 kms con 6200m de desnivel positivo y llegué a meta con 99.89 kms. El desnivel prácticamente también muy similar. 

Aunque he podido testearlo mayormente en trailrunning, no ha sido nada complicado programar un entrenamiento de intervalos en carrera por asfalto o pista. Puedes programarlo fácilmente desde el reloj sin necesidad de la aplicación del móvil. 

A parte de ser un reloj gps que te da mil datos en el deporte que elijas, es un smartwatch, táctil, pantalla a color, muy visual, las notificaciones en la pantalla se ven súper bien y tienes control de música. En definitiva, suunto a creado un reloj tanto para llevarlo en el día a día como para practicar tu deporte favorito.

¡Gracias RunnerInn por esta oportunidad y por hacerlo posible!